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Givi – El frío de Pingüinos desaparece con la pasión motera

Cuando tu cliente confía plenamente en ti porque te considera un partner, la satisfacción y la responsabilidad son enormes a partes iguales.

“El movimiento se demuestra andando” dice el dicho popular (valga la redundancia), porque en una Agencia de Comunicación sobran las palabras y hay que pasar a los hechos. Con más de una década a nuestras espaldas de colaboración directa con una de las marcas más importantes en el sector de los accesorios para moto y motorista podemos decir que estamos más que satisfechos del trabajo que hacemos conjuntamente. Y es que a lo largo de los años hemos demostrado que la comunicación es una carrera de resistencia y que aplicar las teorías de Comunicación Corporativa trae buenos resultados. Dos veces hemos estado con GIVI en el evento Pingüinos y dos veces ha sido un rotundo éxito. La primera no os la podéis perder por ser el primer Flashmob del mundo moto en España.

Este 2020 hemos vuelto a acompañar a GIVI a la concentración invernal motera por excelencia en una edición que volvía a superar su récord de asistencia. Gracias a la confianza que la marca italiana deposita en Medis hemos conseguido dar en el centro de la diana del público objetivo, con una acción que se basaba en la gamificación.

“¿La gami… qué?, no no, eso hay que ver en detalle qué es” hubiese dicho cualquier otra marca. Sin embargo, GIVI, a sabiendas de los buenos resultados que hemos alcanzado en los proyectos que llevamos a cabo con ellos (desde Comunicación & PR, product placement, clipping, acciones no convencionales, etc.) supieron entender nuestra propuesta. No se trataba ni más ni menos que de hacer participes a los asistentes (público objetivo 100%) de las bondades de la marca y sus productos mediante un juego. Una experiencia que deja una huella innegable en su memoria.

Cuatro días pasamos en el pinar en los que desde luego os aseguro, como bien reza el título de esta entrada de blog, que el frío desaparecía gracias a la pasión motera (que sí que sí, que hubo veces que teníamos más frío que alicatando un iglú). Desde las propias ganas de los que asistimos (montando y desmontando, atendiendo, cronometrando, coordinando) hasta la de aquellos que nos arroparon y participaron durante el fin de semana en nuestra acción subieron los grados. Un evento que fue un éxito en lo que a nuestra responsabilidad suponía. Un gran ejercicio de previsión, planificación y realización de este proyecto (lo siento, no tenemos abuela 😉 ) que además se completó con servicio fotográfico, vídeo de la acción y nota de prensa para comunicar lo realizado.

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